HISTORIAS PARA SER CONTADAS

El arma de fuego

La dama  andaba de farra 
celebrando con el grupo de amigas con las que suele juntarse cada viernes en el lounge. Esa noche jugaron a "las Naciones Unidas"... el juego de borrachos que consiste en probar cocteles de todo el mundo.
En noches anteriores habían hecho la famosa ronda de la Ruleta Rusa, pero esta vez era a Las Naciones Unidas que deseaban jugar.

Bebió Mojitos, Caipiriñas, Margaritas, Tom Collins, Gin  and Tonic, Blac Russian, Bellini, Tequila Sunrise, Cuba Libre, Daiquiri,  y hasta el Coche Bomba Irlandés, aparte de jugar a "la Cucaracha", el trago que le gustaba a los músicos de Juan Luis Guerra cuando  andaban de gira.

Cada trago con su respectiva foto subida a las redes sociales...
Tanta mezcla  hizo que los daños colaterales en su cerebro se pusieron en evidencia, a pesar de que ella es una mujer de tiro largo. 

Por ello ni cuenta se dio cuando llegó a su casa, casi de madrugada, y se tiró a la cama con todo y ropa.
Se había dispuesto a dormir hasta el mediodía en que se levantaría a tomar café, su habitual jugo de chinola, la leche descremada y tostadas de pan integral,  el desayuno meridiano preparado por la mucama  a su servicio.

Ring, ring, sonó el teléfono...
-Alou-respondió. La voz estropajosa la delataba.
-Perdon por haberla despertado. Pero es que tengo que decirle algo importante.
-¿Qué cosa?.
-Esta mañana los empleados de limpieza del negocio encontraron un pequeño revólver en el lugar donde usted estaba sentada anoche, y como usted es una importante clienta, me  he tomado la libertad de llamarla para confirmar que esa arma es suya, y devolvérsela.

-Espere un momento, déjeme ver en mi cartera....(Pausa). ¡Bullshit!. ¡Uf!, si , es la mía. Oh my god, qué hice anoche.. es mi pistola. Probablemente se me salió de la cartera. 
-Por suerte, fue en mi negocio, y tenemos empleados serios. De ninguna manera se iba a perder. Aunque no sabemos cómo el portero permitió la entrada de esa arma de fuego, porque la seguridad del negocio tiene prohibido dejar entrar personas portando armas de fuego.
-¿Bueno pues yo siempre he llevado mi pistola en la cartera, porque usted sabe como está la delincuencia. Yo no permito que me anden registrando y cucuteado mi cartera.¿A quién, a mi?. ¡Jum!. Y en cuanto a que no se podía perder, más le vale, porque se podían encontrar en tremendo problema. No se jueguen con eso...Mejor agradezcan que apareciera...
La arrogancia y prepotencia de la dama escandiló al propietario del popular lounge.
-¡Oh!, con que esas tenemos. Talvez usted tenga razón...Yo la llamé más bien por tener una cortesía con usted como clienta del negocio para proceder a devolverle su arma. Pero ya que usted se expresa con nosotros en esos términos, lo que haré es reportar el arma perdida a la policía, diciendo que la encontramos tirada debajo de una mesa, y que no sabemos de quien es.
-Pues mire, usted puede hacer señor lo que le de su malditísima gana. ¿Sabe usted quien me cargó esa arma?. Talvez piensa usted que me haría un daño con eso, ja, ja... No voy a volver más a su negocio, que bastante dinero  le dejo en ganancias con las pendejas cuentas que le hacemos  y con  los tragos tan malos que preparan ustedes con licores falsificados. ¿Usted no sabe quien soy yo?, buen mojón, y haga lo que usted quiera- (click), cerró el teléfono.

Así están algunas de las megadivas y mujeres del medio,  apoyadas por militares y policías de alto rango.
Despues de esto, queda sólo preguntar, ¿quién es más arma de fuego....Ella, o el revólver de detective  que se salió de su cartera.?