¡El bembazo del momento!

El bombazo del sonido de Fuego 90

¿Qué?, no puede ser que Fuego 90
esté sonando así?

Bueno, la compañía Media Streme le colocó uno de sus procesadores de audio de última generación, basado en el sistema Microsoft Windows, a la emisora Fuego 90, y la misma ha dado un cambio fenomenal, que la ha convertido en una de las que tiene uno de los sonidos  más consistentes en el dial, actualmente.

La empresa internacional que regentéa el x86 le ha puesto el equipo en prueba, el cual tiene un costo que solo abarca la cuarta parte de otros procesadores de sonido profesionales, y los resultados son superiores a lo que está en el mercado.

Es un equipo, que según hemos investigado logra corrección de inclinación de fase, el realce estéreo, control automático de ganancia (AGC), ecualización, control de ganancia multibanda, control nivel-pico (limitador), control automático de volumen, y otros detalles técnicos más, a los que solo pueden tener acceso la gente que sabe de radio.

El poder de la arquitectura x86 de Intel está rompiendo ahora mismo con Fuego 90 para asombro de todos los que saben de sonido en la radio, así como radiodifusores, programadores y técnicos.

Con decirles que hasta se le ha ido arriba  a la 91, que tiene  detrás a Teo Beras, el "papá de la radio moderna", el asunto comentan es como para pensarlo.

Teo es el que mayor inversión ha provocado en la radio de este tiempo, no solo en la 91, sino también cuando estuvo en Universal, en Radio Central (la del general Pérez y Pérez, por supuesto), en Raíces, y en la estación digital "La Fría" de la Cervecería).

Willy Rodríguez, cuyo padre era técnico de la radio, y  quien es el cerebro de La Z, y de las demás emisoras de Bienvenido Rodríguez, debería si no lo ha hecho chequear el asunto.

Juan Ramón Gómez Díaz, a quien no le tiembla el pulso para dotar sus estaciones de radio y televisión, con lo mejor del mercado, debería también estar atento al fenómeno.

Marino Vázquez, preocupado siempre por el sonido de sus emisoras, debe estar haciendo anotaciones sobre este caso, porque, si hay una cosa en que la gente del negocio no se pierde, es en verificar como está sonando la competencia. ¡Maña fuera!.

El asunto es más que un desafío, porque el que quiera lo puede comprobar y comparar en el dial.

Marino, no te sofoques,
que el pastel da para
todos...

¡No estamos en los tiempos de Otilio Castro Luperón que tenía en el aire la emisora La Brava, en la San Martín con 27 de Febrero, con un transmisor casero construido sobre el armazón de un  teletipo.

O José A. Semorile y Teleinde, con un transmisor también casero, que cuando había que darle mantenimiento o "ajustarlo", lo hacía con un palo de escoba a distancia, punchándolo, no fuera a ser cosa que le diera un corrientazo.

Así como la era digital lo ha transformado todo, en la radio sucede igual. Se verifica en la cabina de transmisión, los equipos, la música, la programación y el transmisor, que ahora son compactos, no con el rack exagerado de otros tiempos.

Y si algo en lo que ninguna emisora moderna y en competencia se puede perder, es en la calidad de su sonido y señal. 

Lo dice alguien que en la Revolución de Abril de 1965, siendo un muchacho,  se aprovechó de que salieron del aire todas las estaciones de radio en la capital, debido a la conflagración, y montó su propia estación casera, que abarcaba varias cuadras de la vecindad, con el apoyo de un técnico de Rahintel, a partir de lo cual se inició en la comunicación, de manera rudimentaria, transmitiendo desde un pequeño transmisor, y una antena de carro en el techo de la casa, toda la música de los "long-play" que tenía a mano.

¡Y lo mucho que se gozó el barrio el festín de música que le dábamos, con todas las emisoras musicales cerradas, y solo en el aire La Voz Constitucionalista, desde el Edifio Copello en la calle El Conde, con los equipos de Radio HIZ; Radio San Isidro, usando los equipos y frecuencia de Radio Alegría,  la emisora que había sido de Paco Escribano, en Villa Duarte; la Voz de la OEA, con los equipos y la frecuencia de Radio HIN en el Centro de los Héroes, y la emisora de la soldadezca de los norteamericanos, transmitiendo con los equipos  y los estudios de Radio Universal, en el hotel Jaragua, donde luego operó Color Visión, cuando vino desde el hotel Matum de  Santiago.

Y el que quiera discutir conocimientos sobre la radio de antes y de ahora, que hable con Zorro.

Zorro, ¡el mismo Zorro!. ¡Auuuuuuu!