¡Películas y peñiculas!

De paseo por la zona colonial con el amigo Radhy Miranda, buscando un sitio para fumar un Flor Fina de Arturo Fuente Cigar, nos encontramos de repente con un reperpero en la Calle Hostos, con una hilera de trailers que abarcaba dos cuadras. ¿Y qué es lo que está pasando?, fue la pregunta de asombro.... !Nada!, que están filmando una película de Netflix en la zona, donde según los informes, hasta Andy García está participando. La locación era durante tres días el Lucía Bar, que hasta canceló su jueves tradicional para dedicar su espacio al evento. Nos llamó la atención la cantidad de equipos alrededor del perímetro, con camerinos ambulantes, furgones llenos de equipos,
camiones, un furgón lleno de refrescos, comida, delicatessen para los actores y el personal de trabajo, trucks cargados de todo lo necesario para el rodaje de un film con todas las de la ley, como dicen. ¡Tenía que ser una película de fuera!. No es por nada, ni por buscarle quinta pata ni sexta al gato. Lo que sucede es que la diferencia es clara...Dicen que las comparaciones son odiosas, pero en películas dominicanas que se filman aquí, a veces ni un baño aparece para que los actores hagan pipí o se cambien de ropa hay. ¡Narrado por ellos mismos!. Tienen que salir a veces a comer chimichurri donde aparezcan, o pedir una pizza o un picapollo, porque ¡eso es lo que hay!. Y luego los productores se jactan de las entradas y la acogida de un filme. ¡No ombe no!. ¡Ni tanto, pero tampoco!. ¡Copien algo del gran cine!. ¡Cojollo!. ¡Y cojollazo!. (Claro, uno dice esto en favor de ellos, y ¡ni lo agradecen!...lo importarte es ¡salir en la peñícula!