Siempre hemos considerado un estigma el sólo hecho de estar sentado en el "banquillo de los acusados", porque independiente de que sea inocente o culpable un acusado, el poner las nalgas en el mismo lugar donde han puesto el trasero criminales y delincuentes de la más bajo estofa es un "honor" que cualquiera con verguenza y dignidad no quisiera nunca compartir. Awilda Reyes, la suspendida jueza acusada de pertencer a una red que vendía sentencias podrá ser absuelta o no, pero ya quedará marcada "para toda la vida", como dice la canción de Danny Rivera. El asunto es como para pensarlo...Luche usted para no estar sentado ni siquiera un segundo en el detestable "banquillo de los acusados". A veces es peor que el patíbulo.
Zorro.
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No se porque siento una atraccion por esa mujer, sera porque me gustan las malas?, bueno ella no es una belleza de la TV pero tiene algo que me atrae.
ResponderEliminarEstoy de acuerdo contigo, yo sin mucho apuro, podría -aquí entre nos- echarle un cambumbo de buchaos. Ar Diosssssssssssss.................
EliminarNo te gustan las malas, te gustan los malos.
Eliminarsera en calderito
ResponderEliminarY se apareció en una silla de ruedas, ya esta igual.que Muchas de esas damas que delinquen y luego alegan trastornos de salud y salen campantes y sonantes... a los pocos días se les ve en cumpleaños de familiares y de la "enfermedad" ya ni me acuerdo... (Vivían Lubrano sólo una muestra)
ResponderEliminarEso es para que los descerebrados cojan un poco de neuronas. Quien le diría a ella, que de verduga pasaría a víctima? Se dejó utilizar y mira ahora. Una vergüenza para familiares e hijos.
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