Una carta

Daniel Díaz Alejo le hace aclaración al Torito

Hola Joseph,

Antes de comenzar te agradezco la gentileza de tu parte, al permitirme este espacio en tu columna, para referirme a unas declaraciones que  afectan mi carrera de profesional del micrófono y medios televisivos.

Nunca he sido hombre de polémicas, porque al final nada productivo agregan a tu vida. Sin embargo, hay ocasiones en las que uno debe defender lo que es justo y mas que nada lo que es verdad.

Esta es la única oportunidad en que me referiré al tema en cuestión, y lo haga a manera de aclaración y no de disputa.

Escuché de Héctor Acosta (El Torito) la afirmación de que el día de su debut con La Toro Band, en El Show del Mediodía, en el mes de Mayo de 1991, tuvo que ser presentado por Zoila Luna ya que (en sus palabras) Daniel Díaz-Alejo se negó y no quiso presentarme.

Bueno Joseph, me quedé en una pieza porque en mis muchísimos años dentro de los medios, no recuerdo ni una sola ocasión en la que me haya negado a introducir o presentar a ningún artista, pues no fué, no es, ni será mi manera de enfrentar mi trabajo.

Primeramente, en el Show (como decíamos) todo estaba sujeto a libreto. En la producción te señalaban a quien te correspondía cada día.  Luego, y es lo más importante, a esa fecha - Mayo 1991 - ya no era parte del Show del Mediodía. Dejé mis funciones de trabajo en "La Costumbre" en el mes de Agosto de 1990, fecha en la que me mudé a Miami, ciudad en la que comencé a laborar en Radio El Zol en Octubre de ese mismo año, razón más que suficiente para explicar mi asombro al escuchar que 9 meses despues de mi salida, todavía seguía en funciones de presentador. Además Joseph, nunca olvidaré el año 1990 ya que en Enero del mismo, murió mi padre, algo que se grabó con tinta indeleble en mi memoria.

Haber presentado al Torito, artista que ha sido y es un ejemplo de superación, de trabajo, de dedicación, de seriedad y de popularidad, hubiese sido un factor de orgullo para mí al poder, en el momento presente, decir que fuí parte importante en el inicio de la carrera de unos de los más genuinos intérpretes de nuestra música. Pero lamentablemente, la vida me negó esa oportunidad por los motivos antes expuestos. 

Joseph, te agradezco el que me hayas proporcionado tu espacio para esta aclaración, la que como dije al principio, es la única vez que me referiré al tema.

No imaginaba que tantos años después, tuviera que aclarar algo en que  no fui el protagonista. Pero es que al final de mi camino, como ser humano y como profesional, no permito  que una sombra, por pequeña que sea, empañe el techo de mi morada, que  he cuidado con tanto  empeño para que refleje  una trayectoria que me enorgullezca al comentarla con mis hijos y familiares, con  ustedes y con  mi pueblo. Una carrera  en la que nunca me ví envuelto en litigios de farándula,  y la que infinitamente agradezco a Dios por haberme permitido transitar salvando los escollos y manteniendo la ecuanimidad, en un medio que tú bien conoces, duro, implacable; donde no te perdonan el más mínimo deslíz, donde  disfrutan con tus fracasos y donde muy pocos se detienen para reconocer tus méritos.

Atentamente,

Daniel Díaz Alejo