Los caretudos en carnaval permanente

Bautista Rojas Gómez (El Bauta) es lo peor que ha pasado por el Ministerio de Medio Ambiente…

Permitió el desastre ecológico y medioambiental que está haciendo metátais en el contaminado cuerpo del país.

Le ganó en ineficiencia y permisividad a Jaime David Fernández Mirabal, que es mucho decir.

Y ahí lo ven, en lo suyo, perreando en las discotecas. Porque si Hipólito lo hizo, y Leonel también baila, haciendo la coreografía de la movida de fichas de Dominó del Mayimbe, ¿por qué el angelito del Bauta no puede hacerlo?, disfrutando de la música urbana, y el corito que dice "besame, besame, besame, ¡mi mario!".

Pero bueno, las caretas del Bauta las están vendiendo con todo y calva, y no hay que sorprerderse del destapa coreográfico de estos nuevos bailarines que parecen haber surgido de la escuela de Chiqui Haddad o de Altracita Peña.

Lo mejor de todo es que llegó al Ministerio de Medio Ambiente Francisco Domínguez Brito, quien al parrecer se quiere casar con la gloria poniendo la cosa en orden.

¡Pero cuántas caretas le han surgido!
Los metaleros afectados por la resolución que prohibe el desguace de embarcaciones en los ríos Ozama e Isabel, (porque contaminan más sus ya contaminadas aguas), han tenido el tupé  de interponer un recurso de amparo en contra de la prohibición.

Quieren que les permitan continuar contaminando el ambiente.

¡Qué bárbaros!

Bueno sería meterlos todos en uno de esos barcos que desguazan, y hundirlos  con todo y embarcación  para que sigan depredando el fondo del río y se los coman las jaibas.

Pero igual sucede con la Ley que prohibe la práctica de la agricultura  en Valle Nuevo, que encuentra la oposición de familias ricas, que se han ganado millones  dañando con sus sembradíos esa gran reserva acuífera  en Constanza.

Lo sorprendente de todo, es que haya aparecido hasta el ex presidente Hipóilito Mejía defendiendo a los depredadores, usando sus mismos argumentos, de que son "humildes padres de familia", y hay que conciliar con ellos, cuando se sabe que muchos de los que trabajan en los sembradios son haitianos que son llevados diariamente a la zona.

¡Tenía que ser Hipólito Mejía, que ya no es El Guapo de Gurabo, sino el de Valle Nuevo, con su absurda defensa a los depredadores de nuestros recursos naturales.

Otra cosa no se podía esperar de él, con su estilo tan rocambolero.

Y es que Hipólito Mejía no podía quedar fuera del cine criollo, que está muy de moda…

Tenía que aparecer en una nueva película…

Sólo que no le va bien su papel de Terminator….

Debería dejarle eso a Arnold Schwarzenegger.

Es preferible que siga jugando con la perra de Mama Belica.