Personas y personajes

El mundo del espectáculo está lleno de insondables designios que le dan singularidad y particularizan el accionar de los personajes en el tinglado. Algunos como fantoches, arlequines, mimos y titiriteros,  como también los  que se regodean abrevando de ditirambos y los  trágicos que practican el harakiri a la usanza del No y el Kabuki.
La farándula dominicana tiene un giuión cargado de personajes, tanto en el campo artístico, como en la comunicación,  permeada por inefables figuras que con sus truculencias, sus afeites y esteticismos procuran llamar la atención a como dé lugar.
Y en verdad, lo logran…
Pero, ¿qué sucede cuando la gente se aprende al personaje?

A Tito Swing le continúa siendo difícil "volver a ver a linda" con otro tema musical y una pegada similar a la de "si tú quieres colar café, cuélame ese paquete". Es uno de los que se quedó atrapado en el personaje, y ya saben que cuando la gente se aprende al personaje, pierde interés en el mismo. Se lo dice alguien que antes tenía como oficio el quehacer escénico, y que lo obligaba a estudiar las líneas motrices de los personajes en el teatro. Y el mundo del arte, es un teatro…Como pueden ver en las fotos, Tito Swing se ha caracterizado de diferentes modos y maneras, incluyendo la estética urbana.  Nada de eso le ha valido para recuperar el terreno, la imagen y la popularidad perdida. No han faltado las malas lenguas que le atribuyen su desplome al rompimiento con Sexce, su antiguo mánager. ¡Le cayó la maldición de Sexce.

Para nadie es un secreto que Toño Rosario no es el mismo de antes…
Se dejó atrapar por el personaje, y tanto que se le dijo cuando todavía había tiempo de regenerarse, para nacer nuevamente cada día en el interés de la gente.

Es otro al cual la gente le aprendió el personaje, y cuando eso sucede a veces no vale hacer un viacrucis, una hora santa y una procesión para volver al Santo Seno del Señor.

La gente se aprendió el personaje de Toño, el más truculento de nuestros artistas, independientemente de que le haya sacado ventajas a su "performer", situándose en lo más alto del pináculo de la fama y la propaganda del show bussines merenguero.

Pero, nada es "para toda la vida", como dice la canción que canta Danny Rivera.
Hace tiempo que "la yola" de Toño hizo agua, y nadie al parecer se lo ha dicho, porque no hay gente en capacidad ni disposición de decir las cosas antes de que se hunda el barco, por temor a resabios, sin parar mientes en que un consejo u orientación a tiempo, sirven para salvar vidas. 

Aunque ya es proverbial que hay que saber como sacar a uno que se está ahogando, para no hundirse con él y hacer fondo.
Aquí no le doramos la píldora a nadie… Si a esta altura del juego tuviéramos temor de pitchar y lanzar bolas rápidas, hace tiempo que nos hubieramos retirado del terreno.

Toño ha experimentado ya con todas las variantes del personaje que encarna…Medievales, esotéricos, carnavalescos, y ahora galático.
Y los resultados, en los últimos tiempos, no han sido los esperados. Atribuidos por algunos a la misma situación del merengue, porque siempre, en todo, hay que encontrar un culpable, para no mirarse en el espejo roto de la bruja de Blanca Nieves y los Siete Enanitos.

El merenguero necesita de una re-ingeniería, no de imagen, que como ya hemos dicho ha experimentado con ella en demasía, sino en procurar volver a sus raíces de autenticidad de aquellos tiempos, de los emblemáticos merengues que lo inscribieron en la esfera del tiempo, con los magníficos arreglos del maestro Israel Casado.

Muy bien pegó en su momento su "kuliqui takatí" y los relajos, que claro está no pueden faltar en ninguna fiesta. Pero debe retornar a su ausencia…A lo que en definitiva le llevó a los más altos niveles de popularidad y a convertir muchas de sus canciones en clásicos del merengue.

Lo demás es "Biruta y Capulina"…desechos reciclables, por cierto no tan contaminantes como los de otro, evidencia de que se puede convivir con ellos, pero no dejando de aportar las producciones orgánicas valoradas por la gente de inteligente alimentación y buen vivir.