Refiero esto porque ahora resulta que alguna gente de nuestra televisión está “jociquina” con la llegada de franquicias de programas extranjeros, porque entienden que con ello se establece un competencia "desleal" con los de producción criolla, sin parar mientes de que se realizan merced al acopio de talento dominicano.
Y ni siquiera esconden su tufillo a nacionalismo rancio y desfasado.
(En una ocasión Amucaba no quería que al país vinieran artistas extranjeros dizque porque le quitaban trabajo a los criollos. ¡Y los de aquí viajando a todas partes!)
Siempre hemos apoyado y defendido a los artistas dominicanos, pero pienso que es un absurdo oponerse a que la televisión, (que no se encuentra en buen momento) apele a programas de éxito mundial, en tiempos en que hay una estampida de la audiencia joven, que no está viendo programación local, debido al predominio de un contenido desechable, reiterativo, cansón y evidente y comprobada falta de creatividad y calidad. ¡Salvo honrosas excepciones!
No vamos a generalizar, pero hay muchos programas que no se ven, que no venden y que no marcan en las mediciones de audiencia por su contenido chamusquino, a los cuales con todo y ello se protege y apoya.
Acroarte los nomina y premia cada año en El Soberano, y ni eso agradecen.
Pretenden justificarse alegando falta de recursos, pero lo que se evidencia, y no se dice, es su falta de creatividad, en una época donde ya “la pava no pone donde ponía”, y los televidentes no le cogen “corte ni cotorra a nadie”.
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NIURKA BAEZ,
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