ARTE NACIONAL

Artistas y política

Hay gente que se las trae en contra de la participación de los artistas en actividades políticas.

Se resienten contra aquellos que se deciden por ocupar cargos públicos a través de la política, participando como cualquier otro ciudadano en elecciones municipales o confesionales, como si ese derecho le estuviera vedado a los que trabajan las manifestaciones del arte.

Si pueden hacerlo los choferes, profesores, carpinteros, sastres, y gente de cualquier otro oficio, más no así los artistas, porque con ello, según se argumenta, se granjearían la mala voluntad y el desacuerdo de quienes militen en posiciones contrarias. Aparte de consideraciones absurdas como aquella de que la política se le debe reservar a los políticos.

Se llega al extremo de criticar, y de oponerse, a que líderes, precandidatos y candidatos presidenciales, utilicen artistas para actuar en sus concentraciones multitudinarias y actos proselitistas, cuando es algo de uso recurrente en las campañas políticas no solo del país, sino de muchas otras naciones.

Se quiere con ello atentarr al derecho al trabajo que tienen los artistas, en su mayoría contratados  por los organizadores de concentraciones políticas, aunque hay quienes participan de manera voluntaria.

Esa clase de políticos que tan mal consideran y tratan a los artistas, y que tienen aspiraciones de participar en elecciones, deberían ser anotados en el libro del “nunca jamás”.

No solo por la gente del arte, popular o clásico, sino también por los ciudadanos que reciben y disfrutan las expresiones  del arte en sus diferentes manifestaciones.