Concón

El concón, que mucha gente bota cuando cocina arroz...que meten el caldero debajo de la llave en el fregadero para que se desprenda, es vendido como un manjar en este Home Style Deli. ¡Nada menos que un "delicatessen", a 7.99 la libra, con lo que se compra un "lunch" completo en un restaurante dominicano en el Alto Manhattan. ¡Wao!, tan bueno que es un conconcito rociado con habichuelas, y untado de la salsa de la carne en el caldero. ¡Ay Luis Medrano! El caso es que vean la fecha del empaque, y la del vecimiento. ¡Un mes! ¡Por cuánto doy yo ocho dólares con 15 centavos por un concón viejo! Ah, no creo que  sea un supermercado dominicano, como dice el apunte en el cabezal. No solo el dominicano come concón...olvídense de eso. Y no es verdad que va a pagar por un concón de funda guardado en nevera casi un mes. Por lo demás, por citar un solo caso, los boricuas también lo comen, pero le dicen !el rapao! Allí "rapar" no es una mala palabra como aquí. De hecho, los locutores musicales en la radio boricua, cuando los llamaban dominicanas para pedirles música, como allí no es nada malo, y aquí si, les decían en el aire: "Oye, bendita nena, vamos a rapar". Era para provocarlas y sacarlas de casilla, usando una expresión chocante en nuestra cultura por el significado que le damos en el aspecto sexual.