LITERATURA

“Si tuviera que salvar un libro mío, sería éste”, confiesa Mario Vagas Llosa al referirse a Conversación en la catedral, novela que cumple 50 años de su primera publicación y que para el autor representó el libro más complejo que ha escrito.  

En una charla con la periodista Laura García para conmemorar el aniversario de la novela y presentar una nueva edición de la misma, el Premio Nobel de Literatura recordó que el primer año que dedicó a ésta fue de plena oscuridad al no encontrar el hilo conductor para desarrollar la historia de la sociedad peruana afectada por la dictadura militar.  

“La primera idea que tuve de esta novela era no contar la historia del golpe militar sino  mostrar los efectos que tenía la dictadura en la vida no política, cómo afectaba las familias, la vida profesional que se veía afectada en los peruanos. Todas las novelas me han constado, pero creo que en ninguna he trabajo en la oscuridad sobre todo ese primer año, no tenía idea de cómo iba a acomodar todos esos personajes”, revivió.

Vargas Llosa, quien aseguró nunca relee sus novelas ya publicadas, ve con optimismo que en América Latina ya no exista una dictadura militar como las que sucedían a mediados del siglo pasado cuando escribió “Conversación en la catedral”, una historia que se desarrolla alrededor de un joven periodista decepcionado de su país en una charla de cuatro horas con el chofer de su padre.  Aunque el periodista, personaje central, no es Vargas Llosa, el autor reconoce que en cada obra deja una raíz de sí mismo, la memoria de su experiencia. “Muchos escritores cuentan historias basadas en sus experiencias personales, en mis novelas siempre hay experiencias mías, esa experiencia vivida es la material prima”.  

Pilar Reyes, editora de Alfagura, precisó que la nueva edición de Conversación en la catedral tiene una investigación del profesor Carlos Aguirre sobre el proceso de escritura y edición de la novela hace 50 años, ello incluye las misivas que Vargas Llosa envió a sus amigos y editores contando las dificultades para escribirla. El también Premio Cervantes (1994) y el Príncipe de Asturias de las Letras (1986) también presentará en la FIL su más reciente novela, “Tiempos recios”. (El Heraldo)