ARTE NACIONAL

Casinos en hoteles fantasmas

En el local del otrora hotel San Gerónimo, cerrado desde hace varios décadas, sigue operando el casino de juegos, sin que sus propietarios hagan nada por habilitar el local de hospedaje, contraviniendo de ese modo la ley que rige los casinos de juegos.

No les interesa el hotel, sino el casino.

Lo propio ocurre con el Hispaniola, cerrado desde hace tiempo por una “remodelación” que nunca se ha hecho. Pero el casino continua operando a toda capacidad.

Frente a eso las autoridades se hacen de la vista gorda.

El caso del casino de El Maunaloa es una excepción, pues se hizo antes de que se promulgara la ley que los casinos de juego. Sin embargo, su antiguo propietario, Edmon Elías, compensaba de algún modo con el night club que existía en el lugar.

Se debería obligar a que tanto el hotel San Gerónimo y el Hispaniola vuelvan a operar, y de no ser así suspender el negocio de los casinos, para que se cumpla con la ley, y estén todos en igualdad de condiciones.

Aunque muy poco se puede esperar de una nación donde se permite hasta tres bancas de apuestas y de juegos  en el tramo de una cuadra.

Vergüenza y pena debe dar la cantidad de establecimientos de este tipo a todo lo largo y ancho del país, legales e ilegales. como resultado de la permisividad de autoridades y entidades estatales que se benefician de las mismas, desempeñando el mismo rol de muchos usureros que están detrás de ese negocio.

Sabemos que aramos en el desierto al decir y pedir que se respeten las reglas y las leyes del juego, pero creemos cumplir con un deber social al hacerlo.