Vean aquí a la orquesta de Wilfrido Vargas y sus Beduinos en los años 70's. Eran los tiempos de la moda del "african look", o sea del peinado afro.
De igual manera, los músicos usaban uniforme, y hasta el líder, Wilfrido, se vestía igual.
Luego fue que surgió la distinción, de que el líder se vestía diferente. Claro, había que resaltarlo.
En esa época los líderes y los cantantes viajaban a tocar a los pueblos en la misma guagua de los músicos. Pero eso también cambió, cuando se puso de relieve el estrellato, y se consideraba hasta ofensivo que la figura de la orquesta viajara con los músicos. ¡Con tan bueno que es viajar en la guagua con los músicos, haciendo cuentos, cherchas, contando chismes!.
Lo mismo que en los viajes al extranjero, que los músicos y los líderes se montaban juntos en la clase económica de Dominicana de Aviación, bebiendo romo, fumando, haciendo cuentos,. Hasta que los pilotos, de lambones, comenzaron en pleno vuelo a invitar a los líderes y cantantes de combos, a que se fueran a los asientos de primera clase que estaban vacíos.
Hoy día es impensable que la figura de una orquesta viaje en clase económica cuando va de gira al extranjero.
La misma gente que va con ellos los acusaría de miserables, pues no conciben que sus ídolos se comporten igual que ellos, o reciban el mismo trato.
Recuerden que es un mundo de fantasía, muy vaporoso, el que se vende en el arte. Quiéralo usted o no.
El artista que se comporta igual que la gente que lo sigue, sin alimentar sus fantasías, ahí mismo pierde.
Eso lo saben muy bien los urbanos, los artistas negros norteamericanos, los nuevos ricos, y los que profesan la creencia de que "la mitad del pleito es el aguaje".
Son los códigos que mueven a la gente, a la gran masa, para idolotrar a personas magnificadas y consideradas por encima del bien o el mal.
La sencillez y la humildad no vende en el arte comercial.
Por eso una de las mejores campañas publicitarias que ha hecho el Ron Brugal, fue una donde el dueño de una villa llegaba en helicóptero, y tomaba ron de la marca mientras tocaba un piano. Había que idealizarlo en un patrón de vida talvez inalcanzable, pero aspiracional.
El ron es una bebida popular, que bebe el pueblo, pero había que "venderle" a la gente, que es el que beben también los ricos.
Nada de hacer un anuncio de un jodío bebiendo romo. No vende.
El gran Wilfrido Vargas, me gustaría que Guancho Viloria se encuentra con el en un callejón solo los dos, para ver si seguirá haciéndose el loco. Mientras guancho se rompía los presos pulmones tocando, este hacia mueca y después lo traicionó.
ResponderEliminarGuancho pero reclàmale a Wilfrido y deja de escribir pendejadas por aquí, o no tienes el valor para irte a la trompà con Willy?...
EliminarViloria villaman el creador del sonido de los beduinos y traicionado por el infame Wilfrido. Guancho viloria
ResponderEliminarGuancho ya olvida eso!!
EliminarEsa fotos se la tomo fefita y ya tenia 70 años de edad.
ResponderEliminarMe atrevía a compensar a alguien que tenga una foto de esas de los años 70 en blanco y negro del Capotillero Pensionado con su AFRO. Debe de dar risa ver ese negrito y enano con su AFRO. Otra cosa seria interesante saber si cuando El EX del Capotillero Pensionado comenzó a salir con él(él Capo) dicho pájaro y había perdido el cabello. Se supone que si porque El Ex dice haber nacido en los 80. También sería interesante saber si El Ex era obeso cuando vivía AMANSEBAO con el Capotillero Pensionado.
ResponderEliminarAy madre jajajajaja
EliminarJuly siempre conocí a la sucia capo sin cabellos. Según me contó su madre Anathila pie gasou a el se le cayeron como a los 15 años, producto de la huelía de cemento que daba en el mercado!!!
EliminarJajajajaja
EliminarYo nunca hueli cementos.
EliminarYo era un vicioso honrrado que trabaje para mantener mi vicio
A pesar de que el 95
% del perico que consumia me lo regalaban los capo del barrio
El 4% me lo ganaba pichandole a los famosos y hijo de.funcionarios que se tiraban a comprar.
Wilfrido es un gran estafador del sonido de otros, es verdad increíble como dejo loco a guacho, que canta en una iglesia. Tirso el
ResponderEliminarAnónimo