A simple vista se vería descabellado que alguien le ponga el nombre de Covid-19 a un establecimiento comercial de servicio.
Aunque sea una rancheta, no deja de ser un “establecimiento comercial” este local en Tamayo.
La Cafetería El Covid…¿A quién se le ocurre?
¡Poner el nombre del mortal virus a un negocio!.
Se interpretaría que “enferma o acaba con los clientes”, como lo hace el Covid.
Ese sería el razonamiento lógico…
Sin embargo, en estos tiempos en que las cosas marchan al revés, cuando viene a ver el negocito se convierte en exitoso, y se le llena de gente.
No olviden que estamos en tiempos estrambóticos, donde lo raro, lo que va en contra de las costumbres y lo tradicional es lo que llama la atención y gusta.
Así que mucho cuidado con tachar de loco al dueño de la Cafetería El Covid, por su “creativo recurso de marketing artesanal”.
Bueeeeno, pensaran "que lo que 'tá la moda, no incomoda", es propicia la ocasión para tan tétrico nombre.
ResponderEliminarBravo, eso indica que no hay miedo, el miedo vendido por la oms va ligado al virus, mierda to
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