Una Fiesta Híbrida

Es una lástima que la Asociación de Cronistas de Arte no haya podido alcanzar la meta de recaudación de fondos que se propuso con el montaje de la fiesta del lunes en la discoteca Jet Set.
Pese a que se promovió en los medios electrónicos y en la prensa más que cualquier otra, el público no respondió como se esperaba.
Parece que a la gente no le gustó la combinación de Las Chicán y de Kiko, el denominado Presidente del Merengue, que según se sabe está “acabando” por el Cibao, pero que por lo visto en la capital no dice nada.
Kiko es un personaje híbrido, mezcla de Toño Rosario y de Krispy, fórmula que le ha dado resultados en el interior del país, pero no así en la capital, donde se le critica bastante su mimetismo.
En cuanto a Las Chicán, la gente no se paró a bailar en toda la noche, lo que resultó sorprendente, porque las muchachas además de bonitas y simpáticas, cantan muy bien y lucen acopladas.
El repertorio de éxitos clásicos que heredaron de Las Chicán de Wilfrido no animaba a la gente.
En la única ocasión en que dos o tres pareja se decidieron a bailar en la pista, fue cuando interpretaron su nuevo tema.
Ello es señal de que a las muchachas lo que les hace falta es ampliar su repertorio con nuevos merengues.
Por lo demás, hay que decir de ellas que tienen una agenda apretada, curiosamente en el extranjero, donde a diferencia de aquí parecen ser más apreciadas.