La verdad es que hay gente que se pasa. El productor Amauri Sánchez recreó una especie de cabaret, con chicas vistiendo mallas sentadas en sillas con mesas para simular el establecimiento donde se desarrolla la trama del musical Cabaret.
Se trataba de hacer algo diferente en la convocatoria donde se dieron los detalles del montaje.
No se quiso hacer una rueda de prensa común y corriente, sino una especie de “performer” para ambientar a los presentes.
Todo iba muy bien y hasta algunos de los presentes hicieron bromas y chistes con un travesti que había en el grupo de las bailarinas que recorrían todos los ambientes de la discoteca Red, donde se hizo el encuentro.
Todo discurrió entre tragos de vino, whisky, picaderas que se sirvió a raudal a los presentes.
Parece que los tragos le hicieron efecto a uno de los presentes, que no solo le cogió con hablar mucho, sino que al final le juro a Dios quería llevarse a una de las muchachas que participaban en la escenificación del cabaret.
Al tipo los tragos le cogieron con ofrecerle dinero a una de las chicas para que se fuera con él, poniéndola en apuros, y no solo a ella, sino a la gente que andaba con él.
No vamos a decir el nombre porque hasta el momento lo hemos considerado como un asunto de mala bebida.
Sin embargo, esa pretensión puso en evidencia su subconsciente.
Se ve que al tipo le gusta brincar la tablita con chicas de donde Pablito, La Casa de las Modelos, la Casa de las Muñecas y la Casa Rosada.
Si eso fue en la rueda de prensa, habrá que tener cuidado con invitarlo al montaje del musical en el hotel Jaragua.
Como será en un ambiente de tragos, después de algunos “palos” se atreve a subir al escenario a ofrecerle dinero a la bailarina que le gustó.
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