La golpiza que los matones de seguridad del casino del hotel Jaragua le propinaron a uno de los conductores del programa “Desconectados”, para no pagarle una mano de “pocker” que había ganado, replantea el tema que ya hemos tratado de la deficiencia de los servicios de seguridad que algunas empresas ofrecen en el país.Todo ello con el consentimiento de los operadores del establecimiento.
Si algunos conocieran las interioridades y los manejos operacionales de ciertos casinos de juego, no entrarían a jugar en esos establecimientos.
Porque algunos casinos de juego operan como “territorio aparte”, con sus reglas, su vigilancia, su sistema de represión y sus padrinos que en oficinas llenas de monitores de televisión le dan seguimiento a las jugadas de todas las mesas.
Y como de juego se trata, son capaces de eliminar a cualquiera que se cruce en rojo con “la casa”. Y “ la casa” como se sabe, nunca pierde.
No crean que eso sólo se ve en películas.
Pero volviendo a los agentes de seguridad,
en vez de “seguridad”, lo que recibe el ciudadano es inseguridad, como resultado de la prepotencia, la mala educación y la violencia conque se desempeñan los “animales” que fungen como “security” en algunas empresas.
Son esos los responsables de las muertes y de los conflictos que se han suscitado en las entradas de algunas discotecas.
Lo curioso es que empresas importantes como la Cervecería Nacional Dominicana confían sus servicios de seguridad a compañías de comportamiento muy cuestionable, como se pudo ver en el espectáculo de "Viva el Merengue" y en "La Noche de El Torito" celebrando sus 15 años.
Las quejas llovieron a cántaros.
Algunos de esos señores que con tanta prepotencia actúan, y que no tienen reparo en dispensar malos tratos a a la gente de la prensa, cobijan debajo de sus negros uniformes a virtuales delincuentes que estafan a los organizadores de espectáculos.
Si usted los contrata debe tener cuidado con ellos, porque facilmente le montan una mafia haciendo negocio en la entrada o reciclando las taquillas como si fueran ellos los dueños.
Muchos son los bailes y espectáculos que han colapsado debido a la mafia de los porteros y encargados de seguridad.
Hay una empresa de esas de seguridad, el uniforme es bicolor (amarillo y negro) que le hacen la vida imposible y no dejan que uno fotoperiodista no realice o tenga un buen desempeño de su trabajo en el espectáculo. Abordan a uno con unas clases de disparates y estupideces, propias de su ignorancia, que lo que dan es ganas de coger misma cámara y despedazársela en la cabeza. Yo no se, si como parte de su entrenamiento, está el maltratar a la prensa.
ResponderEliminarSobre los casinos, ese mundillo da mucho miedo, verdaderamente tal y como usted dice, si la gente supiera como es el mundo que envuelve a los casinos, es posible que no existieran.