El Show del Mediodía es el programa de televisión que mayor apoyo y sustentación le ha dado a los artistas dominicanos durante todos sus años de existencia.
Debajo de su sombrilla se cobijaron todos los humoristas y comediantes que luego trillaron su propio sendero, como son los casos de Freddy Beras Goico, Cuquín Victoria, Felipe Polanco, Cecilia García, Jochy Santos, Roberto Salcedo, Luisito Martí, y muchos otros que han fallecido.
De las orquestas populares de merengue y las cantantes solistas ni hablar.
Pero así como “El Show” le he hecho bien a muchos, a otros le ha hecho mal.
Se recuerda la ocasión en que Nelson Cordero (El Varón) estaba superpegado en Nueva York con el tema Plátano Maduro que aquí también se convirtió en un éxito en la radio.
Cuando vino al país y se presentó en “El Show del Mediodía” sin estar preparado, que su orquesta sonó como una lata vieja, ahí mismo terminó el encanto.
El Varón se cayó y nunca pudo volver a levantar cabeza.
A Nikauly de la Mota le sucedió algo igual.
El Show del Mediodía fue el programa que echó por el suelo sin querer sus aspiraciones de lanzarse como cantante.
Antes de lo que le sucedió en el programa Nikauly iba bien con una expectativa muy bien creada, donde la gente esperaba para ver si era verdad que cantaba.
La estaban “acechando” y cometió un grave error cuando se le ocurrió cantar en el programa acompañada por la orquesta de El Jeffrey.
La música estaba medio tono más alta y ella se vio en graves apuros, al punto de que la gente quedó defraudada y se concluyó en que su actuación como cantante había sido un desastre.
A partir de ahí se minó la confianza de la gente en ella como vocalista.
Y que conste, ella no es la única en problemas de tono cuando ha sido acompañada en vivo por una orquesta.
Recordamos las críticas que se le hacían en el pasado a Rhina Ramírez a quienes los músicos la acusaban de ser arritmica, y lo mismo se decía de Edilí en su etapa emergente.
Y es que cantar tiene sus trucos, los que a veces los nuevos cantantes por inveteranos desconocen.
No todo el mundo tiene la veteranía de un Expedy Pou, considerado el cantante más despistado de toda la historia.
Ello a propósito de que en una ocasión cantó una canción en televisión de arriba abajo con la pista correspondiente a otro tema.
El tipo ni se inmutó, terminó su canción, como si la hubiera hecho con la pista correspondiente.
!Qué bárbaro!.
jueves, 24 de abril de 2008
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