Suya Caballo?

Cuando Richie Ricardo declaró hace poco que había sido novio de la cantante y actriz cubana Niurka Marcos hubo gente que lo puso en duda y hasta dijo que era un invento del hombre de "El Hot Dog" para llamar la atención y tratar de volver al medio.
Uno llegó a preguntarse que cómo un hombre tan feo podía decir que tuvo de novia a esa "mamasota".
Tuvo la propia artista en una entrevista que admitir esa relación con el "Natural".
Pues miren que sí. Así como ustedes veían a ese 'largurucho" que acusaban de imitar a Johnny Ventura y que el decía que lo suyo era "natural", el tipo estuvo comiendo por un tiempo de ese "calderito."
Claro está eran los tiempos en que la belleza cubana recien había salido de Cuba, donde se desempeñaba como bailarina del Club Tropicana.
Todavía no había conocido a Osorio que la llevó al estrellato ni se había casado con Bobby Larios.
No había desarrollado el "tigueraje" que la llevó a decir publicamente que Osorio no la satisfacía sexualmente, ni tampoco había posado desnuda en la portada de la revista Play Boy.
Tampoco tenía al tatuaje de alcatraz en la espalda que todos quisieran moderle.
Nadie puede negar que en los años ochenta con el merengue el plena efervescencia los merengueros de la época se despachaban de lo mejor de la oferta femenina que había en el menú.
Johnny Ventura se hizo una figura proverbial como "el caballo" que muchas querían montar.
Solo hay que recordar la expresión de:"suya caballo?".
Rubby Perez conquistaba actrices de telenovelas venezolanas en la época en que gobernaba su amigo Carlos Andrés Pérez. Se recuerda que hasta se mudó a Venezuela.
Y ni hablar de Anthony Rios con Yolandita Monge.
De Wilfrido Vargas ni hablar, dejando sentir "su trompeta" en diversos "auditorios."
El último memorable fue Sergio Vargas con la merenguera puertorriqueña "Giselle"
Hasta los cronistas de arte andaban en lances con las más populares artistas de Puerto Rico (Ednita Nazario, Glorivee, Gigi Lamour, Wanda y Alicia, Nitzalis, Sonia San Miguel) de Argentina (Fátima Pulido) y toda una constelación de cubanas de Miami.
Fue una época irrepetible de mucho "glamour" donde todo se daba en grande, diferente a la de ahora donde los artistas populares no sacan "una gata a miar".