Pasó El "Guiso" Electoral

Algunos merengueros “guisaron” muy bien, con el dinero que se repartió en la campaña, lo cual no vemos mal, pues consideramos justo que en una repartición le toque también “lo suyo” a los artistas.
Después de todo, creo que no hay dinero que pueda pagar el beneficio que los políticos le sacan a los merengues que toman como temas de campaña.
Como por ejemplo “Chiquito Pero Tupío”, “Ay Que Olla”, “E’ Pa’ Fuera Que Van”, “Subido en el Palo”.
Mientras los creativos publicitarios se “exprimen” el cerebro buscando la frase adecuada o el eslogan para una costosa campaña, sucede que el estribillo de un merengue popular surte más efecto en la gente que todas lo que ellos han inventado.
Los políticos se nutren de la creatividad de los merengueros, usan sus merengues, también sus figuras, y aunque remuneren bien todo lo que paguen lo considero poco en comparación con el beneficio que han sacado.
Se trata de estribillos y de frases que se emplean para llevar un candidato a la presidencia de la República.
Es la creatividad de un músico popular sirviendo de plataforma para llevar a alguien a la presidencia de la República, léase bien.
Se han puesto a pensar en lo que eso significa?
Repito que eso debería valer todos los cuartos del mundo.
Cobren bien y déjense de estar con sentimentalismos baratos, como El Torito, que según han dicho sólo le cobra a Miguel Vargas la nómina de sus músicos.
Si Nelson de la Olla hubiera cotizado bien el uso que le dieron a su "Ay Qué Olla", probablemente ahora no estuviera él "en olla".

EL RECORD DE JOSEITO MATEO

Por cierto, el artista que tiene el récord del que más le ha cantado a presidentes es Joseíto Mateo.
El Diablo Mateo le ha cantado merengues a Trujillo, al doctor Balaguer y ahora a Leonel Fernández.
Mientras algunos artistas se están entrenando en esta campaña, Joseíto tiene 60 años “picando” con la política.
Con la difeferencia de que mientras ahora los partidos toman merengues ya hechos (Subido en el Palo, Dejen Esos Perros, No Hay Nadie Mas, Solo Contigo), los de Joseíto son compuestos por él expresamente para cada ocasión, y para cada presidente.
Por algo le dicen “El Diablo” a Joseíto.