domingo, 25 de mayo de 2008

QUE LOS RICOS NO VAN AL CIELO...

Este cohete!
Mientras la mayoría de la gente se la tiene que ingeniar trabajando hasta 15 horas diarias para ganarse el “moro de cada día”, hay en el medio unos jóvenes millonarios, que se dan una vida que no respeta día ni horas para la diversión.
Carlos, heredero de una rancia familia, con negocios en bienes raíces y telefonía celular, un día va a Sophia's en un Ferrari y al día siguiente está en Aura con un Porshe de última generación.
Los camareros se desviven por servirle y gusto da ver como se descorchan bebidas premiun sin contemplación para brindar con chicas hermosas de alta sociedad de esas que se ofenden si les dicen “megadivas.
Es parte de una generación que ha roto con la vieja tradición de la gente que solo quiere el dinero para acumularlo y hacer fortuna.
El inefable Edgar Farías contrataba un avión y buscaba un grupo de chicas de la agencia Top Models para que acompañaran al grupo de amigos para ir a almorzar a Capitán Cook, en la playa de Punta Cana, con su famosa parrilla donde se asan centenares de camarones y de gambas, para una maratónica jornada en un mediodia de un miercoles cualquiera.
Y al regresar en la tarde, desviar el avión hacia Puerto Plata, para satisfacer el antojo de ir a descorchar una botella de champagne en la Puntilla de Pier Giorgio, frente al mar en Sosua.
Esto sin contar los pasadías de playa un dia cualquiera en medio de la semana para almorzar en el restaurant Neptuno, con el permiso de Rita para ubicar la mesa en el mismo embarcadero donde estaba amarrada la lancha que esperaba la trulla para el fiestón en el mar.
Memorables las noches de karaoke y guitarras en el yate de Luiggi en el alta mar donde todo el mundo al son de la borrachera se desinhibe para cantar.
Fiestas en las que algunas chicas se mareaban, no tanto por lo que habían bebido, sino por los movimientos de la embarcación.
Una verdadera experiencia cenar en el puerto de la Romana y a la mañana siguiente, después de la travesía nocturna, atracar para desayunar en Samaná.
Y despertarse entre las piernas de una muchacha a la que usted le había prometido que nada “iba a suceder”, pero si sucedió, porque fue sin “querer queriendo”.
Una vida de rumba que muchos no comparten, por el derroche en que según alegan se incurre, pero que siempre he respetado porque forma parte de un estilo que algunos se pueden dar.
Es la vida de gente rica que no le “para bola”
a comentarios ni criticas de los que creen en aquello de que “más facil pasa un camello por el ojo de una aguja que un rico al cielo”.
Un maniqueismo barato para que la gente no aspire y se conforme con su miseria.
Pertenecen al grupo al que le han hecho creer aquello de que los “ricos no son felices” y se “enferman más que los pobres”.
Puro fetiche.

3 comentarios:

  1. Señor Cáceres:
    Quién es esa joven tan bella haciendo esa seña tan indecente? Es Honey?

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  2. Mira realmente no se de quien es la foto pero se parece bastante a Mía Taveras, la joven que fue Miss República Dominicana y que luego realizara un paupérrimo papel en la telenovela Trópico, que se transmitió por Antena Latina, tanto así que creo que se fue a estudiar actuación fuera del país.

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  3. No ella es Mia Taveras

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NIURKA BAEZ,
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