CAPÚ Y NO TE ABAJES!

La policía apresó a un tal Cristino Espinal que el pasado lunes hizo llamada telefónica al Aeropuerto Internacional Las Américas para comunicar que en uno de los aviones había colocado una bomba, lo que provocó la suspensión de todos los vuelos.
El individuo había lanzado luego el celular a una letrina del sector Pantojas donde reside su madrasta.
Pero la policía no solo rastreó la llamada y apresó a quien la había hecho, sino que los agentes se metieron en la letrina y recuperaron el celular, y ahora el tipo se le vará bien fea.
Hay que acreditar a la policía que ultimamente remueve aire, mar y tierra en procura de capturar cuerpos del delito, como se pudo ver también con la recuperación del cañón de un fusil utilizado en el caso Paya que había sido lanzado al mar.
Lo más importante de todo es la señal que se envía a los delincuentes de la red de telefonía
celular y los que usan el ciber espacio para lanzar campañas sucias y difamatorias.
Hay que recordar el apresamiento del sujeto que envió un pasquín electrónico en contra del
presidente de la República que creía núnca lo iban a descubrir , como también el sometimiento a la justicia y condena, de un hombre despechado que manipuló la foto de una ex novia mediante el empleo del recurso de photoshop para que apareciera desnuda, la cual distribuyó en la red.
Con una facilidad increible la policía lo rastreó, lo ubicó y lo apresó.
En ese espejo deberían mirarse algunos delincuentes cibernéticos que piensan que desde el anonimado pueden cometer impunemente sus fechorías.
Por cierto, que escuché a uno decir que cuando quiere hacer una maldad o cometer una bellaquería a través de la red sin ser descubierto, dizque se va a un centro de internet y alquila un espacio en una computadora.
Y es que son tan estupidos que todavía creen en eso.
Actúan igual que alguna gente que se dedica a sustraer artículos de las góndolas de tiendas y supermercados porque dizque conocen dónde están las cámaras ocultas del establecimiento y saben como evadirlas.
Si supieran que no solo están dentro de las esferas negras que hay en el techo...
Que una caja de corn flake en lo más alto del estante puede ser el camuflaje de una cámara oculta, lo mismo que una caja de zapatos que nadie alcanza en una zapatería.
Por eso es que tantos son atrapados ''infraganti" y van a la cárcel o pasan la verguenza.
Hasta en los casinos hay gente queriendo hacer trampa, sin percatarse de que en las pantallas del cuarto de vigilancia que estos tienen les pueden estar mirando hasta los calzoncillos...
Créanse que en este país en ese sentido no hay avance...
Basta y sobra recordar que nos formamos en una cultura del caliesaje desde la época de la dictadura.

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