Por Johnny Arrendel
No le veo sustentación a la denuncia del cineasta y productor televisivo Pinky Pintor de que las redes de distribución de películas pirateadas están vinculadas al narcotráfico.
Al menos no el aval o peso especifico que requiere una denuncia de tal gravedad.
Uno conoce a Pinky como uno de los productores de mayor arraigo en la actualidad, y sabe que si manejase datos certeros pudo apuntalar su revelación con pruebas audiovisuales.
Incluso, ceder la exclusiva de un palo de tal proporción a Nuria Piera o Alicia Ortega.
No obstante, vemos que su reacción guarda ciertos paralelos con las que en su momento expresaron Angel Muñiz y Alfonso Rodríguez, directores que también han fallado en crear el filme criollo que este año pueda ser considerado un "palo" autentico.
Me parece que ninguno de estos realizadores hubiese puesto el grito al cielo con la piratería (Que reitero, no deja de ser una realidad malsana), si largas filas caracterizaran sus exhibiciones.
Paradójicamente este ha sido el año más prolífico en películas de factura dominicana, pero los productores, directores y guionistas parecen no darse cuenta que el modelo inicial está agotado.
FOTO:
Pinky Pintor
Es la desesperación que los lleva a desbocarse con declaraciones como estas, Hasta que ellos no entiendan que ya el cine no se hace para exhibir en salas, sino para venderlas en cd, van a estar en la misma brega detrás de los que hacen lo que ellos mismos debieran hacer. Es lo que hacen los grandes productores en Estados Unidos y les va muy bien. Allá hay uno que tiene el colmo de pensar en poner una sala de cine en cada pueblo para exhibir sus películas. ¡qué soñador!
ResponderEliminar