Joseph Cáceres

PERROS CON MENÚ NAVIDEÑO

Contratar a Anthoy Santos no es una tarea fácil.
Lo primero que hay que hacer es viajar asu pueblo, Las Matas de Santa Cruz, en Monte Cristy, con el inconveniente de que si el artista no está de humor no recibe al visitante, aún haya hecho este un viaje de cientos de kilómetros.
Hay una historia muy socorrida en Santiago de un dueño de emisora de radio y un promotor que viajaron a Montecristi detrás de una contratación del artista, y en el camino, como una forma de halagarlo y de congraciarse con él compraron  un puerco asado entero en su puya para llevarselo de regalo.
Cuando llegaron a la casa del popular bachatero que tocaron la puerta y se anunciaron, Anthony no los quiso recibir con la excusa de que estaba durmiendo.
A los visitantes no les quedó más remedio que emprender el camino de regreso sin haber conversado sobre el negocio.
Antes de irse le dejaron el puerco asado como ”un gesto de cortesía y de buena voluntad”.
Cuando los empleados de la casa le dijeron a Santos que le habían dejado un puerco asado de regalo, dizque este dijo:
-Que trajeron un puerco asado?, anden, échenselo a los perros!.
Los empleados cumplieron la órden, y los perros se dieron tremenda ”panceada” de puerco asado, sin estar en navidad…
Dizque solo les faltó la telera, un morito de guandules y una ensaladita rusa para completar el menú navideño.