Qué bonito!
Santiago es un amigo de gustos muy finos a quien le encanta la buena comida y el buen vino. Gusta de los whisky de malta, de las carnes maduradas, y su buen gusto se expresa siempre en todos sus dominios.
En los encuentros familiares y de amigos nunca falta en medio de los tragos una picadera de galletas de soda y tuna Bumble Bee "Solid White Albacore".
Detesta el personaje de Tubérculo Gourmet a quien considera la personificación de lo más grosero.
En los encuentros familiares y de amigos nunca falta en medio de los tragos una picadera de galletas de soda y tuna Bumble Bee "Solid White Albacore".
Detesta el personaje de Tubérculo Gourmet a quien considera la personificación de lo más grosero.
En días pasados pasó personalmente por el supermercado a comprar tuna. Nada que ver con las latas comerciales, que para él son desechables y no entran en ningún rango de sus preferencias.
Por ello escogió una Reserva de Familia de Ortiz con el Bonito del Norte en Aceite de Oliva, cuyo empaque establece una especie de denominación de orígen.
Por ello escogió una Reserva de Familia de Ortiz con el Bonito del Norte en Aceite de Oliva, cuyo empaque establece una especie de denominación de orígen.
Dice la envoltura o etiqueta que fue "pescado de uno en uno en el Mar Cantábrico, y que entró en el puerto de la Guetaria en la costera del 2005. Que fue cuidadosamente seleccionado y una vez envasado permaneció en bodega, madurando, durante 12 meses.".
Vaya usted a ver, doce meses madurando un pecesito...Los pescan de esa manera, porque si lo hacen con redes, se puede dañar por el "estrés" que le da al pez.
Vaya usted a ver, doce meses madurando un pecesito...Los pescan de esa manera, porque si lo hacen con redes, se puede dañar por el "estrés" que le da al pez.
Una latita cuesta 450 pesos en Supermercados Nacional.
Porque como perfumes buenos, son caros y vienen en empaques pequeños.
Pero, hay que darle placer al paladar, y Santiago es de la gente que hassta viaja al extranjero en busca de exquisiteces.
Contento llegó a la casa con su Bonito del Norte, pensando en la degustación que haría ese sábado en la tarde...
Contento llegó a la casa con su Bonito del Norte, pensando en la degustación que haría ese sábado en la tarde...
Pero cometió el grave error de colocarlo en la despensa, y cuando la fue a buscar se encontró con que Altagracia, la doméstica de la casa, se lo había "abrochado" con un pan sobao, como si fuera una tuna cualquiera, sin reparar en su sabor, textura, añada, ni valor.
Lo peor es que se atrevió a decir que las otras tunas que ella comía en la casa eran mejores, porque tenían mejor sabor. Qué bonito!
La doméstica de mi amigo Mariano Abréu sí que es especial.
A Mariano le encanta andar a la moda, sobre con unas camisas de las que diseña Martín Polanco que hace intercambios con gente de la televisión.
Cuando llegó la moda la moda de las camisas corrugadas, o arrugadas, Marianito quiso entrar en esa onda.
Compró dos camisas carísimas, más caras que las lisas, porque es es la cosa.
Se las puso y las echó a lavar en su casa.
Grande fue su sorpresa cuando llegó del trabajo a la casa, y se encontró a la doméstica fajada con una plancha, tratando de eliminarle las arrugas a la camisa.
-Jesús santísimo, pero no hay forma de quitarle estas arrugas a estas camisa- decía la doña, mientras Mariano se quedó trancado, del tiro, con la boca abierta.
Siguiendo con las domésticas, las hay también demasiado ingenuas o talvez demasiado brutas.
Recuerdo lo que Altagrcia hizo cuando se fue la luz y la planta no arrancó porque se le había acabado la gasolina.
Ella fue con un envase a suministrarle el combustible.
Como estaba oscuro, adivinen con qué procuraba iluminar la boca del tanque de combustible de la planta para echarle la gasolina?. Con una antorcha echa de periódicos!.
No cayó en Haina porque a la "fatal" la vieron a tiempo.
Lo peor es que se atrevió a decir que las otras tunas que ella comía en la casa eran mejores, porque tenían mejor sabor. Qué bonito!
Sin arrugas...
La doméstica de mi amigo Mariano Abréu sí que es especial.
A Mariano le encanta andar a la moda, sobre con unas camisas de las que diseña Martín Polanco que hace intercambios con gente de la televisión.
Cuando llegó la moda la moda de las camisas corrugadas, o arrugadas, Marianito quiso entrar en esa onda.
Compró dos camisas carísimas, más caras que las lisas, porque es es la cosa.
Se las puso y las echó a lavar en su casa.
Grande fue su sorpresa cuando llegó del trabajo a la casa, y se encontró a la doméstica fajada con una plancha, tratando de eliminarle las arrugas a la camisa.
-Jesús santísimo, pero no hay forma de quitarle estas arrugas a estas camisa- decía la doña, mientras Mariano se quedó trancado, del tiro, con la boca abierta.
Echando gasolina
Siguiendo con las domésticas, las hay también demasiado ingenuas o talvez demasiado brutas.
Recuerdo lo que Altagrcia hizo cuando se fue la luz y la planta no arrancó porque se le había acabado la gasolina.
Ella fue con un envase a suministrarle el combustible.
Como estaba oscuro, adivinen con qué procuraba iluminar la boca del tanque de combustible de la planta para echarle la gasolina?. Con una antorcha echa de periódicos!.
No cayó en Haina porque a la "fatal" la vieron a tiempo.
mas estupidos son esos que la contratan, que publicacion mas idiota, claro contratan cualquier persona ignorante para pagarles chilatas. lo barato sale carooooo
ResponderEliminarCuando el jefe de la casa le dice a la domestica que cuando coja el telefono le diga que el no esta, suena el telefono y la domestica le dice que si, que el jefe esta en la casa y el jefe echando humo por las orejas le dice por que no le dijo que no estaba con lo que la domestica le contesta que ella es testigo de jehova y por lo tanto no puede decir mentiras.
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