Joseph Cáceres

¿Playa en Güibia? Ja ja ja...

ROBERTO SALCEDO

Después de varios años mostrando incapacidad para reconstruir la Plaza de Güibia, el alcalde Roberto Esmérito Salcedo Gavilán lo abre al público y ofrece una nueva demostración de su invalidez en el manejo de los asuntos de la ciudad.

Los que nos ha presentado es un desgarbado intento de montar una playa con todo y el mobiliario propio de las piscinas y playas de hoteles, en el corazón de la ciudad y en una de sus principales avenidas; para después repetir nuevamente la demagógica y absurda promesa de que convertirá al Malecón en una playa al estilo de Río de Janeiro en Brasil, proyecto para el cual ya tiene hecho los estudios.

Lo peor de toda esta parafernalia mentirosa es la acompaña con la perversa intención de desacreditar a los hoteles, presentándolos como responsables de la contaminación del mar frente a la ciudad.

Primero, ¿por qué intentar convertir el parque de Güibia en playa, como un gran aporte a los ciudadanos, si allí el mar está contaminado? Y es cierto que está muy contaminado.

Tanto, que es una irresponsabilidad estimular a las personas a usar Güibia como balneario.

Pero, Salcedo Gavilán sabe que la principal fuente de contaminación es el río Ozama, convertido en cloaca nauseabunda receptora de todas las inmundicias que producen los barrios y empresas instalados en sus orillas.

Otro aspecto del caso Güibia que lo muestra como un irresponsable en el manejo de la ciudad es la creación de un segundo parque en el Malecón sin estacionamiento para vehículos.

Quienes usan esta avenida han vivido la traumática experiencia de pasar en las tardes y las noches frente al Parque Juan Barón. Como no tiene estacionamientos, los autos parquean en la avenida y lo que se forma allí es un incómodo tapón. Ahora ocurre lo mismo en Güibia.

Puedo citar otros detalles, pero me referiré a un aspecto que muestra el tipo de persona que es nuestro acalde golfista. El 5 de marzo de este año los medios de comunicación difundieron un acto en el cual el ministro de Turismo, Francisco Javier García Fernández, le entregaba a Esmérito la primera partida de RD$60 millones que aportaría esa entidad al Ayuntamiento para llevar a cabo la reconstrucción de los parques del Malecón (el de Güibia y el Eugenio María de Hostos).

Esmérito es olvidadizo o desagradecido, o ambas cosas a la vez. Revisé todas las informaciones sobre Güibia y hablan del protagonismo de Salcedo Gavilán y del Ayuntamiento. Él olvidó decir que después de años de fracasar en el intento, el parque se hizo gracias a los fondos aportados por el ministro de Turismo. Le recuerdo que: ¡Es de bien nacidos ser agradecidos! (Manuel Quiterio Cedeño/El Caribe)