Ofertas "gatonómicas"
Se están abriendo muchos nuevos restaurantes, algunos con especialidades gourmet muy sospechosas.
Si uno se llleva de lo que a veces ofertan en la carta, puede que termine intoxicado o envenenado con algunos "menjunges" que se inventan unos chef que parece salidos de un laboratorio gastronómico.
Se inventan unos platos con los que compiten en festivales de gastronomía, que no se sabe cómo es que ganan premios.
Para mí que compran los jurados, o los emborrachan antes de ponerlos como mamarrachos a probar los platos.
Dicen un refrán que de lo sublime a lo ridículo sólo hay un paso, y ese parece ser el caso de algunos de esos restaurantes "gourmets" nuevos que se creen la mamá de Tarzán y la última Cocacola del desierto.
Con eso le dan la razón a Tubérculo Gormet con esa "comía de pájaros" que ofertan.
Es duro pagar una cuenta alta por comer mojigangas que los camareros, (entrenados para esos fines) proponen a los clientes de gustos exquisitos.
Cuentas que a veces lucen exageradas.
En vez de una oferta gastronómica, lo que tienen ciertos restaurantes es una oferta "gatonómica", porque meten "gato entre macuto" para robarte sin ni siquiera ponerse el antifás de ladrones como se usaba en el viejo Oeste.
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