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El malecón , en su parte inicial llamado Paseo Presidente Billini en los años 40. No se ven automóviles, ni gente. A lo lejos, dos carretas de vendedores de carbón o de víveres. Distante el obelisco, construido por el tirano Rafael Trujillo en el año 1935 para conmemorar el cambio de nombre de la ciudad de Santo Domingo a Ciudad Trujillo. El oprobio de un megalómano que muchos aplaudieron y celebraron, poniendo de relieve su lisonjera desverguenza. De la quietud de ese malecón, nada queda. Los centenares de camiones cargueros, furgones, tanqueros, guaguas, voladoras, carros, motocicletas, motoconchos, coches, carretas, carretillas y carretones que por ahí circulan, formando hasta tapones, arrastraron y sepultaron los viejos recuerdos de la apacible ciudad que se dormía antes del atardecer y tomaba siesta después del desayuno.
Aunque la foto es a blanco y negro se percibe un paisaje preciso, ademas de la relajacion que emitia estar en el area del malecon. Ya eso acabo.
ResponderEliminarSeñor Joseph me encanta esta section de tu blog, es extremadamente educativa e aprendido muchisimo de las estampas del pasado que publica. Muchas gracias por todo..
ResponderEliminarMi abuelo dice q en la 3ra casa de aqui pa alla o de alla pa aca como ud quiera ponelo en la foto funcionaba una casa de cita en esos tiempo.
ResponderEliminarJejeje MOnaco hasta hace unos años y ahora se llama foxxxy´s y en la esquina está Baby Doll.
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