martes, 28 de octubre de 2014

No olviden que después de las 12 de la noche, comienza a levitar mi otro yo...

En blanco y negro...
Cuando la noche se marche, pasaré a recogerte por el cine,  para que hablemos sin atavismos, sin fonemas, ni elisiones, y sin perder la cordura...
¿Sabes qué?, me gusta encontrarme con gente como tú.
¿Sabes por qué?, ¡porque eres diferente  a las que empeñaron su talento y ahora no tienen dinero para sacarlo de la compraventa!.
Sé que eres impredecible, que no te gusta jugar a la niña buena en el último minuto, y no puedo negar que eso me provoca,  me seduce, y hasta me excita. ¡Que pudieras escapar del Capitán Garfio, es más que una proeza!
Te quiero adelantar, que ayer me bañé en un río de tornillos asimetrados, sin roscas y sin tuercas. Era tan mecánico todo, que en un momento pensé en una desambiguación inducida por las máquinas que provocaron las nubes y las tempestades cósmicas que ocultaron el día la vez aquella...Pero te prometo no volver a correr así el BM, practicando el difícil salto hacia la muerte.
Ahora te dejo, no olvides que te estaré esperando con las pupilas colgando de una mano, basculando mi atención en una vieja película a blanco y negro de John Wayne de esas que nunca fueron oscarizadas...

1 comentario:

Se valora el envío de comentarios no ofensivos apegados a la moderación.
NIURKA BAEZ,
Moderadora de comentarios