viernes, 22 de mayo de 2015

EMPLEADOS DE OFICINAS PUBLICAS EN OTROS TIEMPOS...

Sólo el que trabajo en oficinas públicas en los años 50, 60, y los 70, conoce lo que es fajarse a tipografiar un informe financiero en una máquinilla Underwood  de carro grande, con original y cinco copias, donde estaba prohibido corregir con "liquid paper" o usar goma de borrar, porque se trataba de trabajos que iban al palacio de Gobierno, a la oficina del Secretario de Estado o a la Administración General. Tenía todo que salir nítido, sin errores, no borrones. No habían computadoras, internet, impresoras. Si acaso aparecía una fotocopiadora de las grandes, que había que calentarla antes de usarlas. Lo que más se usaba para reproducir, era el mimeógrafo. ¡Qué pela!, trabajar con tan rudimentarios y limitados recursos. ¡Y tan bien que salían los trabajos!. Porque había que ser muy buen taquígrafo, calígrafo y mecanógrafo y estenógrafo, graduado del Instituto Duployé, del Instituto Greeg, de la Academia Santiago,  para trabajar en las áreas más importantes de las oficinas pública. Algunos empleados eran unos diablos, cogiendo hasta 80 palabras por minuto, ¡y sin faltas!. Hoy día hay modernas computadoras, con procesadores de palabras, programas World, de Office,  Microsoft Excel, diccionarios y correctores electrónicos, y  con todo y eso hay unos bárbaros  que en un párrafo de 30 palabras cometen 10 faltas ortográficas. Son "altitas", "periodita", "comelciante", "dotol", "lisensiados", "locutol", "compositol", "polisticos", "lideles choferile", "produtol", "promotol", "umoritas", "ulbanos", "saceldotes", "gualdia", "chofel", "economita", "invelsionita". "atol"...¡Están en todas partes"

7 comentarios:

  1. No pues yo puedo ser profesor y asi me cristican por mi fartas ortografica.

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  2. Recuerdo a mi padre, que era pintor de brocha gorda, sobre todo en mi caso, en los años 70 hablar de esta profesión como si fuera la gran cosa, hablaba de un mecanógrafo casi como hablar de un médico, trabajo este que nunca estudie, pese a su insistencia, mucho menos ejercí, puesto que nunca me pareció la gran cosa, y vaya que era valorado en esa época, aunque esta práctica solo podía generar a un empleado un sueldo mínimo de esa época. Ahora que usted zorro hace esta reseña añoranza, es que me doy cuenta de lo complejo que era este oficio, que a mí me parecía simple en aquel momento, y el estándar de calidad casi obligatorio que había que poseer, no era un rulo, la última vez que pase donde estaba ubicado el duploye lo vi en ruinas y obsolescencia, como cambia la vida, lo que alguna vez fue la excelente escuela en estas disciplinas, ya hoy está desaparecida, cuando debió ser conservada como patrimonio histórico.

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  3. dios verdad que si ..! hasta en los periodicos matutinos y vepertinos y no hay correctores de estilos que modernidad lo que ha traido es la enmancipacion de los analfabetos y maleducados hoy en dia .salvesa quie pueda...

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    1. Callese coño que muchos brutos tenemos mas educación y respeto que mucho llamado diiiiiiisque profecionales.

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  4. Yo tengo una pregunta, en donde entra el maldito filtro de esta maldita pagina, cuando hay alguien aqui que dice todo lo que le da su maldita gana y le publican todas sus mierdas...

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  5. Yo disfrute de esa gran profesión, MECANÓGRAFO ARCHIVISTA. Esas funciones marcaron mi vida para siempre. Nuevamente sería, MECANÓGRAFO ARCHIVISTA

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NIURKA BAEZ,
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