¡Bla, bla, Bla, bla!

Estudiantes de la UASD llegan al colmo de movilizarse y de quemar gomas en protesta cuando les aumentan 20 pesos a la inscripción, alegando que ellos son pobres y que no pueden pagarlo. Sin embargo, hacen cuentas hasta de 2 mil pesos bebiendo cerveza y romo en las barras y colmadones que quedan en los alrededores de la universidad. ¿Y entonces, mis pequeños saltamontes?

Padres de estudiantes de los kilómetros de la carretera Sánchez, protestan porque  tienen que pagar a plazos la inscripción de sus hijos en el colegio de Movearte,  que les cobra cuotas de 50 pesos y 300 pesos, hasta completar los mil 400 y mil 600 de inscripción. ¡Cuánta facilidad!. Gente que vive en el Residencial José Contreras y Manresa, y dizque son “humildes padres de familia” que no pueden pagar eso…Sin embargo no salen de las bancas de apuestas jugando miles de pesos.

¡Ahí está!. De algo están sirviendo las cámaras de vigilancia del 911, una de las cuales captó las circunstancia que se dieron  en el hecho  en que una bala le rompió el cristal  a la jeepeta de la periodista Celina Suriel.
La cámara captó la balecera, y se determinó que el disparo que le rompió el cristal al vehículo no estaba dirigido a ella, sino que fue por coincidencia que lo impactó.
Iba pasando por la calle Paris con Josefa Brea en el momento en que se produjo un accidente de tránsito, que del cual provocó  una balacera (aquí la gente se mata por cualquier choquecito), y la bala le romnpió el cristal.
¡Caso aclarado!. Están trabajando las camaritas…

Y dictaron orden dearresto contra los principales ejecutivos del Banco Peravia. Pero aquí, entre nos, a quienes deberían también apresar es a los de la Superintendencia de Bancos que permitieron esa falla. ¡Presos deberían estar!.

Por cierto, los servicios bancarios se encarecen cada vez más. Es una barbaridad lo que están haciendo algunos bancos. ¡Cobrándote por tu tener tu dinero depositado en ellos!. Dinero al que  le sacan ventaja y mucho provecho otorgando préstamos para carros e hipotecas

¡Melodia de arrabal!, como la película y el tango de Carlos Gardel. Así se pudiera titular lo que está aconteciendo en la autovía del Este que conduce a Bávaro y Punta Cana. ¡La están arrabalizando en la entrada de las zonas turísticas!. Pero lo mismo está ocurriendo  en los alrededores de buques Carnival en Luperón Puerto Plata. No lo han terminado, ¡y se está arrabalizando!. Gente que se muda en los alrededores, para luego comenzar a montar tarantines y chucherías para aprovechar a los turistas que llegarán por la misma. ¡Y eso no puede ser!. ¡No debe ser permitido!.

Este país es un desorden. Anteriormente, para ir al Cibao por la carretera Duarte había que cruzar  medio a medio por Villa Altagracia, ralentizando el trayecto, además de que los municipes de los alrededores se quejaban de los accidentes de tránsito.
Cuando se hizo la nueva carretera se decidió que bordeara el pueblo de Villa Altagracia, lo que agilizó la travesía, y lo hizo más seguro. 
¡Pero oh destino!. Comenzaron los villaltagracianos a mudarse de lado y lado  en la nueva vía, ¡a construir ranchetas, en terrenos invadidos!.
Y como es lógico suponer, al cruzar de un lado a otro por una vía rápida, se producen accidentes mortales. ¡Y oh sorpresa!. De nuevo la protesta, queriendo ahora que les pongan puentes para pasos a desnivel, y ¡ellos cruzar así seguros!.
Y  jure usted que si se les hacen los puentes, entonces no los usan y siguen cruzando a pie, como los chivos sin ley, aunque los maten. ¡Somo dominicanos, somos así y así somos!.

La arrabalización es general, todo bajo la consigna de que son “humildes padres de familia”.
Mire usted la calle El Conde, que se quiere convertir en un boulevar turístico, con cafeterías  y mesas  en el frente, como los de Champs Elyses en Paris que llega hasta  al Arco de Triunfo….Aquí llegarían a nuestra Puerta del Conde. Pero el Conde está arrabalizado de cuadros haitianos y venta de chucherías, que afean todo el entorno. ¡Qué turista puede andar en ese arrabal!. Melodia de arrabal…primer lugar en el hit parade dominicano. ¡Pegado, sin payola!….