Joseph Cáceres

Parte Rápido y Furioso 8 se filmará en La Habana

Por Johnny Arrendel

Parte de la octava entrega de Rápido y Furioso se filmará en La Habana, lo que implicará la participación de más de mil personas, , y constituirá el reto más grande para el Instituto Cubano de Arte e Industria Cinematográficas (ICAIC), al colaborar con la productora Estudios Universal.

Ya se han realizado casting para seleccionar actores y extras, e incluso, se invitó se evaluaron cientos de coches antiguos, entre ellos Fords, Chevrolests y otros clásicos, que se conocen en la capital cubana como “Almendrones”, y que habitualmente circulan por sus calles en perfecto estado de conservación.

La confirmación de esta información que se había propalado como simple especulación, surge alrededor de la visita estos 21 y 22 de marzo del presidente de Estados Unidos Barack Obama.

Periódicos de impacto mundial, como El País, de España, resaltan que dentro de este proceso de apertura hacia y desde Cuba, el legendario grupo  británico Rolling Stones, se presentará en un concierto que congregará 200 mil personas este 25 de marzo, para lo que han llegado a la ciudad 62 contenedores con equipos con equipos para el montaje.

Mientras que el 3 de mayo próximo, la prestigiosa firma francesa Chanel presentará su colección de moda femenina Crucero 2016/17, en el Paseo del Prado, locación que también pretendía la producción de Fast And Furious 8, que protagonizan Vin Diesel, Duayne Johnson y Michelle Rodriguez.

La película Rápido y Furioso 8 se estrenaría el 17 de abril de 2017 y tiene una vez más a Vin Diesel y Dwayne Johnson como protagonistas.

Hasta ahora en Cuba no se ha rodado una película con la complejidad de "Rápido y furioso” en cuanto a escenas de acrobacia, maniobras automovilísticas y explosiones.

Se enumeran las virtudes de rodar en Cuba, en especial las playas y montañas, carreteras, ferrocarriles y algo de una infraestructura de transporte.

Esa nación también tiene una industria del entretenimiento con profesionales capacitados. La comida es barata y la mano de obra es sustancialmente menos costosa de lo que sería en Estados Unidos.