jueves, 23 de noviembre de 2017

El arte de crecer en escena…


 Miriam Cruz se consagra como estrella en un escenario
Si en algo hay que concluir de Miriam Cruz, anoche, en el Teatro de Bellas Artes, es que la artista se consagró a nivel escénico.

Con una producción impecable de René Brea, (que nuevamente pone de relieve sus condiciones como creativo del quehacer escénico), la artista se lució haciendo acopio de toda su experiencia en la música, en un tránsito furtivo, amable, y en un estilo muy particular por una diversidad temática, conjugando elementos de exquisitez como la gran diva de la canción que es.

¿Qué decir de la producción en la que se montó? Lo primero es resaltar la disposición de la orquesta, rompiendo con lo habitual en el montaje lineal y convencional, colocada en base a escalas de tres pisos, en una diferenciación de planos  muy acertada que le permitía potenciar su sonido merced a  una consistencia impresionante, bajo las directrices de Alfio Lora. 

La iluminación, línea gráfica, y los elementos visuales  en permanente ataque y llamada de atención, sobre la figura de la versátil Miriam Cruz en su tránsito por los diferentes géneros con los que interactuó, para convertir su espectáculo en uno de los mejores de los que en este año han escalado el entarimado.

La Diva hizo anoche de todo…Cantó en inglés, en portugués, tangos, samba, texmex, baladas, boleros, rock, en una exaltación a las más emblemáticas figuras de la canción internacional,  con segmentos como el dedicado a Michael Jackson, con pantominas, bailes, caracterización del personaje, proyecciones,  en una estupenda recreación  con la que se le imprimió gran carácter a la realización escénica.

El segmento exaltando a Juan Gabriel, a  Rocío Jurado, Durcal. Su paso por los clásicos  de José Feliciano, José José, en base a una configuración de elementos muy acertados  en función de los planos diseñados dentro de la estructura temática que la producción procuraba alcanzar.

Todo sin desperdicio,  porque cuando se trabaja con criterio, nada falta ni sobra.

Apreciable el detalle de  Miriam Cruz en el actual momento, resume en en escena con singularidad y gracia, la experiencia de sus años  apoyada en el dintel del arte, haciendo acopio de los elementos que le confieren singularidad a su ser artístico, con una destreza y un dominio como pocos en el medio.


Vayan nuestras acrteditaciones para Miriam, René, y todos los que intervinieron en ese singular montaje, uno de los mejores subidos a escena en este año.

6 comentarios:

  1. con los mismos chillidos de siempre igual que Milly....nuestras merengueras con edad promedio de 65 años,,,que viva el Merengue....anciano

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Y que viva Tu maldita madre!!!...😂

      Eliminar
    2. Pero no las compares contigo. Como los mediocres hacen pocas cosas terminan retirandose y cansandose antes, por eso tu te recogiste hace decadas. Deja a los que no son mediocres retirarse cuando lo decidan.

      Eliminar
  2. Ojalá Miriam y su equipo traigan ese espectáculo a NY, he leído las criticas y son muy buenas! La edad nunca será un factor importante en cuanto al arte, y esas mujeres son como el vino Francés mientras mas viejo de más calidad y exquisitez!

    ResponderEliminar

Se valora el envío de comentarios no ofensivos apegados a la moderación.
NIURKA BAEZ,
Moderadora de comentarios