A Bachatazos Limpios

La semana pasada la periodista Inmaculada Cruz Hierro publicó un reportaje en el periódico Listin Diario en torno a la discriminación que todavía existe en algunos clubes y núcleos sociales en contra de la bachata.
Mientras algunos entendidos opinaban que existen clubes donde todavía no se le permite entrada a la bachata, Héctor Acosta decía que en su caso no ha confrontado problemas para interpretar ese género en los lugares en que ha querido.
Talvez tenga razón en esa parte, porque por ejemplo, en Montecristo Café ni en Loft, al igual que en muchos otros clubes, nunca los “disc-jockeys” difunden bachata.
Y El Torito cuando ha ido a esos lugares después de tocar merengue la ha emprendido a bachatazos limpios haciendo que los riquitos y blanquitos rockeros presentes las escuchen y hasta las bailen.
Pero eso no significa que no exista discriminación en contra del género, porque cuando nel Torito se va más nunca se vuelve escuchar bachata en esos lugares.
Recientemente la Colgate Palmolive contrató la orquesta de Héctor Acosta para amenizar la fiesta navideña de sus empleados.
Saben qué plantearon los de la Colgate entre varias de sus quisquillosas y hasta necias exigencias?. Oh!, que El Torito no tocara bachata en la fiesta.
De igual manera que cuando estuvieran tocando no subieran mujeres a bailar en la tarima, que no saludaran a ningun empleado, que los músicos debían estar en una mesa bien alejados de los invitados. En fin toda una vaina, como si fueran ellos los artistas poniendo todo tipo de exigencias en su contrato.
Para no cansarles el cuento, el Torito se fue en el primer set de la fiesta a merengazos limpios, sin tocar ninguna bachata. Pero en el segundo, hizo una especie de “toma lo que te mandaron”, y le dió bachata por un tubo a los presentes.
Un chusco que se la gozaba dijo como Cuquín Victoria: !Coje ahí, por pechú!