El Diablo Mateo En La Picota

El “diablo” Joseíto Mateo acaba de engancharse a la reelección.
Hay que decir que mucho duró para dar ese paso, a lo cual tiene perfecto derecho como cualquier ciudadano.
Y lo hace de la forma en que siempre ha sabido hacerlo: Grabando un merengue en cuyas letras proclama que “Leonel lo está haciendo bien, y que no lo podemos cambiar”.
Las letras dicen: “Hay que estar con el que está y con el que va a ganar. A Leonel lo puso Dios, Balaguer y Juan Bosch”.
Hay que admitir que le quedó bonita esa frase al viejo zamarrullón que parece un personaje de Macondo amigo del Coronel Aureliano Buendía.
A Joseíto Mateo hay que quererlo como es, pero en modo alguno podemos sustraernos de analizarlo.
El mismo , como buen cocinero que es, se coloca en la “parrilla” del debate cuando da pasos como el mencionado.
Repito que está en su derecho de promover y apoyar al candidato de su preferencia, pero no deja de llamar la atención el hecho de que siempre se trata de gente que está en el poder.
Lo hizo en el pasado con Joaquín Balaguer, a quien aupó para que siguiera en el mando con el merengue “Chiquito Pero Tupío,.
Y si nos vamos más hacia atrás nos encontraremos con toda una discografía de merengues y alabanzas al dictador Rafael Leonidas Trujillo.
Nadie ha sabido mejor “buscársela” con los gobernantes de turno que quieren reeligirse para seguir en el poder que Joseíto Mateo, aunque diga que su apoyo a Leonel es expontáneo y que no busca nada.
!Ay si no le buscan lo suyo!
El octogenario Rey del Merengue viene desde los años cincuenta de la Era de Trujillo alabando las virtudes de los presidentes.
!Más de 60 años en esa “picada”!. Y algunos tanto que critican a Sergio Vargas , a Ramón Orlando, al Mayimbe, que despës de todo son unos “chivitos” delante de Joseíto.
Por cierto, que recordamos una anécdota de principios de los años sesenta, a raíz de que “le dieran pa’ abajo” al dictador Trujillo.
Joseíto, como era uno de los principales cantantes que exaltaba la era de Trujillo, se fue para Puerto Rico, pues en el país se vivían momentos muy difíciles con las turbas de gente del pueblo que asaltaban las residencias de los calieses y de todos los que se habían identificado con el caído régimen.
Lo que menos se imaginaba Joseíto era que al llegar al aeropuerto de Isla Verde se iba a encontrar en la terminal con un grupo de dominicanos residentes en la isla que esperaban a unos familiares que llegaban en el mismo vuelo.
Cuando los criollos vieron a Joseíto le vocearon’ “!Míralo ahí, el artista que más le cantó a Trujillo!.
Pero Joseíto no se amilanó, pues ya estaba en Puerto Rico, y detuvo su marcha para responder:
-Okey!, yo le cantaba, pero ustedes lo bailaban, buenos pendejos!- y siguió su camino hacia la salida.
Sin lugar a dudas unade esas geniales salidas de ese legendario artista al cual con razón bautizaron como “El Diablo”.
Y ya saben que “más sabe el diablo por viejo, que por diablo”