EL BALCONCITO DEL TERROR

Pensaba que el incómodo balcón del teatro la Fiesta del hotel Jaragua sólo se habilitaba para colocar a los periodistas de espectáculos cada vez que se presenta un “show” artístico en ese establecimiento.
Pero hoy vemos que los periodistas, fotógrafos y camarógrafos que cubren las fuentes políticas también han protestado porque allí fueron colocados en el almuerzo de la Cámara Americana de Comercio cuyo invitado era el candidato reformista Amable Aristy Castro.
Al igual como sucede con los cronistas de arte en los eventos artísticos se les confinó en el fatídico balconcito, desde el cual sólo pueden y ver al escenario quienes están en la primera fila y los demás tienen que ponerse de pies.
Alguien debería decirle a los organizadores de eventos que ése lugar no es adecuado para nadie, para que no siga sucediendo lo que ocurrió con la presentación de Cabaret de Amauri Sánchez en esa sala.
Yanira Ferry anunció el “balconcito” como una área VIP exclusiva para los periodistas y los que cayeron en ese “gancho” se pasaron toda la jornada muy molestos criticando el lugar, en tanto que algunos ni siquiera esperaron el final del montaje.